lunes, 20 de julio de 2009

Taller Lexicográfico

Academia Dominicana de la Lengua

Con la conducción de la Coordinadora de la Tertulia Lingüística de la Academia, María José Rincón, se llevó a cabo el Segundo Taller Lexicografía en la sede de la Corporación de Académicos que dirige el doctor Bruno Rosario Candelier, quien conjuntamente con el equipo lexicográfico de la Academia participó activamente en las dos jornadas que comprendió el taller.


El programa del Taller abarcó cuatro grandes temas: Clasificación Tipológica de los diccionarios, El corpus lexicográfico, La macroestructura de los diccionarios y la microestructura de los diccionarios, subdivididos en los subtemas precisos para abordar la delicada tarea de elaborar un diccionario de dominicanismos, propósito fundamental de este segundo taller con el equipo lexicográfico de la Academia integrado por los académicos: Ramón Emilio Reyes, Roxana Amaro, Carmen Pérez Valerio y Domingo Caba, entre otros.


Al iniciar los trabajos, María José recalcó la necesidad de tener claro el tipo de diccionario a elaborar, en este punto explicó los tipos de diccionarios posibles para atender al propósito planteado en esta Academia, presentar un abanico de posibilidades apropiadas, dijo, permitirá que seleccionemos el más adecuado y, además, que permita determinar cuáles palabras precisamos recoger y cuáles no.


Planteadas las opciones, se procedió a delimitar la perspectiva desde la cual el equipo trabajaría, uno de los acuerdos consistió en definir que el diccionario de dominicanismos será sincrónico, el cual abarcará vocablos y expresiones usuales en el español dominicano desde principios del siglo XX hasta la actualidad. Incluso, debe tomarse en cuenta aquellas palabras presentes en los textos, aunque las realidades que designan hayan desaparecido.

La experta explicó que nuestro diccionario de dominicanismo ha de explicarse en los preliminares, donde pueden consignarse elementos diacrónicos, agregó que este diccionario debe regirse por un criterio restringido, según la variedad diatópica.


Parcelará el léxico desde el punto de vista geográfico, aplicable sólo a la República Dominicana, sin excluir aquellos datos o elementos que ayuden al diccionario a ser explicativo o didáctico.


El criterio diatópico será el que regirá para seleccionar las palabras que conformarán el corpus del diccionario de dominicanismo. Éste será un diccionario dialectal, restringido externo, diatópico, puntualizó María José.


Al continuar con las deliberaciones, se acordó que el diccionario será de uso, pero que han de hacerse acotaciones normativas, necesarias para aclarar conceptos, vocablos y realidades a las cuales éstos hacen referencia.


Es decir, consignar un sistema de referencia normativa de lo apropiado, aclarado en los preliminares del diccionario. Indicó que dentro de las variantes dadas en el uso lexical ha de seleccionarse aquella que sirva de referente, es decir, la modélica o adecuada.


En resumen, el diccionario de dominicanismos será sobre cómo se habla, no sobre cómo debe ser, sin obviar las acotaciones normativas.


Aclarado el tema del tipo de diccionario a elaborar, se procedió a explicar el corpus lexicográfico, es decir, la conformación del material que servirá de base al producto propuesto.


“Este es un diccionario de nueva planta”, explicó María José, puesto que implica elaborar un proyecto, un diseño al cual le sigue una investigación de campo o bibliográfica para la recolección de datos. Delimitó dos fases fundamentales para realizar esta tarea, a saber:


1-Organizar el corpus lexicográfico o conjunto de nomenclatura que se incluirá en el diccionario.


2-Redacción y composición de cada una de las entradas del diccionario. La calidad del mismo dependerá, precisó, de seleccionar acertadamente los vocablos representativos del tópico elegido para elaborar el diccionario de dominicanismos.

Lo anterior se podrá visualizar en este esquema:

FUENTES
/ \
¿Cuáles? Soporte
/ \ \
primarias secundarias \
/ \ Archivos lexicográficos
lingüísticas metalingüísticas \ \
(obras, textos, diccionarios Nómina Corpus
foros, estudios etc. qué / \
traten sobre el léxico.) / Consigna técnicas
Base de datos para organizar
que registra en fichas material léxico.
Individuales todas las
obras que se usaron para
elaborar el corpus.

Las deliberaciones en torno a la macroestructura del diccionario continuaron para precisar los criterios de lematización o palabras a seleccionar.


El lema es cada una de la palabras que entran al diccionario ; las locuciones o lexías, frase hechas van en las sub-entradas, precisó la experta, añadió que detalles o criterios extralingüísticos como el tamaño, los prejuicios etc. no caben dentro de los parámetros a seguir para la elaboración del diccionario, en cambio la frecuencia de uso, la variedad diastrática, comparado con otra variedad de referencia, así como el criterio diferencial referido a las razones de pertenencia a la variedad seleccionada serán los criterios contrastivos a tomarse en cuenta.


En esta parte, María José señaló algunos errores frecuentes, patentes en los diccionarios de americanismos, veamos:


1--mezclar criterios sincrónicos y genéticos, diacrónicos-históricos.

2--inclusión errónea de peninsularismos.

3--trasvase indiscriminado de palabras sin filtrarlas (ej. usar datos de otros diccionarios tal cual sin validar o verificar)

4--preferencia, predominio exagerado del léxico que designa realidades típicas del lugar. Ej. Delictivo, en lugar de delictuoso.

5--exclusión de palabras, especialmente las consideradas vulgares.

6--limitarse a palabras o usos distintos del peninsular. Ej. Conferenciante --conferencista

En otro orden, se habló sobre la microestructura que consiste en toda la información que comporta cada palabra, es decir, es lo que se dice y cómo se dice cada palabra.


Se explicó que el primer enunciado está formado por toda la información gramatical, etimológica, categoría, área a la cual pertenece, variedad dialectal, división silábica, marcas de diferenciación sincrónica, diacrónica y contrastiva; mientras que el segundo enunciado de la palabra consigna la definición en sí del vocablo.


Al abordar esta parte se sugirió que las palabras se consignen en el diccionario de dominicanismos según las formas que se utilicen, es decir, usar ambas formas, ejemplo: sancocho-salcocho; zafacón-safacón.


También se acordó utilizar marcas diferenciadoras para dominicanismos léxicos y/o semánticos; así como usar sólo las marcas gramaticales en las entradas, evitar las marcas de transición semántica.


Agregó que es necesario tomar en cuenta las marcas diasistemáticas, las diatópicas, diastráticas y las diafásicas puesto que cada una de ellas comportan informaciones importantes para el usuario del diccionario. Las temporales, por ejemplo, asignan a la palabra información sobre la vigencia de uso de la palabra (neologismo-anticuado o antiguo). Mientras que las diatópicas aluden o delimitan la zona lingüística donde su usa esa palabra. Por otro lado, las diastráticas son marcas que señalan los niveles o registros de la lengua acordes con el grado académico o cultural del hablante, es decir, general-coloquial-popular.


Por último, las marcas diafásicas refiéranse a lo correcto o no, lo que se puede decir o no, según el contexto o situación de comunicación del hablante. Ej. formal-informal (vulgarismos) y las marcas connotativas que indican el grado de valoración que ha de adoptar el hablante ante un hecho lingüístico (irónico-vulgar-despectivo, etc.).


Explicando la complejidad del trabajo a realizar, la facilitadora precisó que la mayoría de los artículos lexicográficos son múltiples, otros (escasos), simples que sólo tienen una acepción.


Recalcó la importancia de la definición adecuada de los vocablos puesto que ésta debe explicar la realidad a través de las palabras, de la óptica de la lengua. Para que sea válida una definición debe poseer definido (lema) y definidor (significado). Además, éstas deben cumplir cuatro principios básicos:


1*debe estar reflejada en una oración que se identifique o sea sinónimo del definido o lema. Ambos deben ser intercambiables, definición propia=metalengua, contenido. Debe lograrse la ley de sinonimia, es decir, que el definido y el definidor se correspondan y uno pueda sustituir al otro (las palabras gramaticales se definen en forma impropia, pues la definición se refiere a la función de las palabras, no a su esencia. En este tipo de definición se recalcan los rasgos semánticos y/o positivos de una palabra determinada, así como sus posibilidades diferenciadoras con relación a otras palabras).

2*ley de equivalencia categorial, las definiciones se han de corresponder con la categoría gramatical a la cual pertenece la palabra definida. Ej. bufo-a. adj. 1 Cómico, grotesco.

3* regla o ley de transparencia, consiste en que debe estar redactada con palabras de fácil comprensión para el usuario, entendible.

4*la autosuficiencia, la definición debe usar palabras que estén en el diccionario, evitar las pistas perdidas o palabras que no se definan en el diccionario.

Con relación a este último principio, María José precisó que no nos compete, en virtud de la naturaleza de nuestro diccionario, en cambio los tres primeros son imprescindibles. Al concluir sus explicaciones destacó la importancia de tener en cuenta el contorno de las definiciones que son aquellos elementos recurrentes en el definidor y el definido.

Concluida esta jornada formativa se acordaron los plazos para entregar las primeras fichas, una vez asignadas las obras a consultar para conformar el corpus lexicográfico del diccionario de dominicanismos coordinado por doña María José Rincón y dirigido por el doctor Bruno Rosario Candelier, Director de la Academia Dominicana de la Lengua.

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